Numancia-Barça: todo sigue igual

Nada ha cambiado en el FC Barcelona. Partido calcado al inicio de Liga del año pasado, cuando el Barça empató en el Sardinero. Nuevo técnico, vicios iguales. Cinco fichajes, sólo uno titular. Misma dinámica. Tocar y tocar para nada, sin fruto.

El once inoperante de Guardiola estuvo formado por Valdés, Alves, Márquez, Puyol, Abidal; Touré Yayá, Xavi, Iniesta; Messi, Eto´o y Henry. Vaya, que Dani era la única novedad respecto al año pasado. Difícil es revolucionar un estilo sin variaciones sustanciales.

Antes de empezar el partido TODOS sabíamos como se presentaría el Numancia. La famosa "defensa numantina" no era ninguna sorpresa. Y el campo de reducidas dimensiones tampoco. Pero nosotros hemos jugado todo el rato por el centro del campo, sin abrirlo. Fácil para el Numancia, imposible para un equipo que solo tiene en Messi a un jugador capaz de desequilibrar en el uno contra uno.

Este verano se han fichado a jugadores "de grupo", complementos, pero no a futbolistas determinantes. Si esperamos que Hleb, Keita, Cáceres, Piqué o Alves nos resuelvan los partidos por sí solos, con su inspiración, vamos mal encaminados. Si Messi no acierta, y Eto´o no atina de cara a la portería, no hay alternativas. Henry es un lastre. Ocupa la teórica posición de extremo izquierda pero nunca está en su sitio. Se va al centro y no cubre a Abidal. Todos sabemos que a Henry no le gusta jugar allí, pero Guardiola se empeña y damos ventaja al rival. Como Samuel se ha quedado, Henry o juega por la izquierda o se queda en el banquillo. Debía ser el delantero centro y ahora no se sabe de qué juega ni si lo hace.

Iniesta ha sido una sombra de sí mismo. Y a Xavi se le ha olvidado jugar como lo hace habitualmente con la selección. Claro, siempre es más sencillo y menos cansado destacar en unos pocos partidos internacionales a lo largo del año que rendir toda una temporada. Touré Yayá está desconocido y Keita tampoco ha participado cuando ha entrado por Andrés en la segunda mitad.

La defensa sigue siendo una catástrofe. Encajamos goles con gran facilidad. Alves se va al medio del campo, deja su zona vacía, Márquez intenta arreglarlo pero llega tarde, Puyol no se sabe y Abidal con la mente en Francia. Y claro, Mario, un jugador desconocido pero listo, marca a placer. Fácil, muy fácil. Da gusto ver jugar a Abidal. Gusto para los equipos a los que nos enfrentamos. Cuentan con un jugador más en sus filas. El error de Abidal siempre está ahí, presente, para obsequiar al equipo contrario. ¿Este año tampoco se entrena? ¿Buscamos otra excusa?

Valdés podría haber hecho algo más en el gol. Nadie cubre los laterales cuando suben, porqué éstos atacan por el centro en vez de hacerlo por las bandas y así abrir el campo, porqué nos embotellamos por centro...muchas incógnitas. Y el cuerpo técnico no los soluciona.

Hleb y Bojan han dado algo de aire al Barça. Con Hleb por fin se han hechos jugadas desde el extremo derecho que han creado cierto peligro y con el catalán se ha vuelto a demostrar su eficacia en espacios reducidos. Pero los cambios se han hecho muy tarde. Demasiado.

Guardiola ha resumido lo visto en el terreno de juego: "Hemos hecho un mal partido". Bueno, al menos no nos ha engañado.

Mal día para los barcelonistas. Perdimos también en el estreno del Barça Atlètic en 2ªB (el Santa Eulàlia nos ha ganado por 1-0) y el Barça de balonmano ha caído ante el Granollers en la final de la Liga de los Pirineos (23-37).

Saludos. VISCA EL BARÇA!

(fotografía de "Henry en Soria" propiedad de su autor)